Coaching
, psicoterapia, asesoramiento, counseling, mentoring, orientación, etc…Un montón de conceptos, pero ¿cuál es el que necesitas? Hoy en día existen multitud de términos para definir un objetivo común a todos ellos que, con los matices específicos para cada caso, se podría resumir como: propiciar la mejoría personal del individuo y su conducta, así como su desarrollo personal en los diversos ámbitos de la vida.
Antes de empezar. El psicólogo, profesional del comportamiento humano
Como siempre recordamos, el profesional especializado en el comportamiento humano es el psicólogo. La psicología es la ciencia encargada de trasladar sus conocimientos en beneficio del comportamiento humano, ya sea mediante psicoterapia, coaching, mentoring, asesoramiento, cousenling u orientación. Un psicólogo puede ser todo eso, pero todos esos no tienen porqué ser psicólogos.
No obstante, cabe recordar que aunque el psicólogo sea el especialista en conducta humana, existen otros profesionales especializados en algunas de estas herramientas de desarrollo personal que realizan también estas funciones, salvo la psicoterapia sobre la salud que solo pueden realizarla especialistas en psicología clínica y sanitaria. Otros profesionales que realicen en cierto modo funciones de mejoría personal del individuo pueden ser los educadores, maestros, pedagogos, psicopedagogos, entrenadores deportivos profesionales, terapeutas, trabajadores sociales o incluso los tan de moda coach (ejecutivo, educativo, laboral, personal, etc.) siempre y cuando estén debidamente formados en las competencias relacionadas.
En caso de duda, consulta siempre con un psicólogo, no vayas a crear en la trampa de la estafa del coaching como criticó el humorista David Broncano y recordábamos en este otro artículo: La estafa del coaching, una crítica humorística de David Broncano (VIDEO).
Diferencias entre coaching, psicoterapia, asesoramiento, mentoring, consueling y orientación
Si tienes prisa y no quieres leerte el artículo entero, ni liarte con tanta terminación “-ing”, el paralelismo básico de cada término, desde mi punto de vista, es la que sigue:
- Coaching: entrenamiento.
- Psicoterapia: mejora problemas de la salud.
- Asesoramiento: transferencia de conocimiento.
- Mentoring: tutorización.
- Counseling: consejo, consulta.
- Orientación: guía.
>> Artículo relacionado: Diferencias entre Orientación Profesional, Vocacional y Laboral.
En fin, vayamos al grano.
Para mostrar las diferencias entre términos cogeremos como referencia al coaching y el resto, ya que el coaching está tan de moda que quizás sea el término que necesite mayor aclaración:
Diferencia entre coaching y psicoterapia
Sintetizando, el coaching está orientado a la mejora del desempeño personal y profesional con el fin de alentar un 0mayor desarrollo del propio potencial.
El coaching está enfocado a guiar o entrenar a personas que no tienen un problema de salud mientras que la psicoterapia se centra en resolver problemas de índole patológica, a problemas psicológicos diagnosticados.
El coaching trabaja con clientes (el coachee) que buscan mejorar su desempeño y potencial en un área concreta (ejecutivo, educativo, deportivo, personal…) y en la psicoterapia los clientes son a su vez pacientes con una patología, la cual es la que le impide desarrollar sus habilidades personales y su desarrollo personal.
En el coaching es el cliente el responsable en desarrollar sus competencias. Es como el que va al gimnasio, por mucho que el entrenador le diga que tiene que salir a correr, el responsable de salir a correr es cliente. Mientras tanto, el psicoterapeuta desarrolla las competencias necesarias junto con el cliente para lograr el objetivo.
>> Artículo relacionado: Entrenar para entrenar. La importancia de formarse en competencias.
En el coaching, es el cliente el que propone las metas y el que alcanza los objetivos por sus propios méritos. En la psicoterapia la intervención es más directa y es el psicoterapeuta el que establece los objetivos e intenta que el paciente los alcance con su ayuda.
Eso sí, ambos términos comparten parte de los objetivos finales, ideas e incluso herramientas.
Diferencia entre coaching y asesoramiento psicológico
En este caso, el asesoramiento se trata de un proceso más lineal donde el asesor se encuentra levemente por encima del cliente, en el sentido de que el cliente acude al asesor porque cree que es un profesional experto en una materia que el cliente no domina. Por lo tanto, se transfiere conocimiento. Ejemplo: no sé realizar una tarea (por ejemplo, una técnica de dinámica de grupo) y acudo a un asesor, en este caso un psicólogo, para que me informe, forme o ejecute una tarea para la cual él es el experto.
En el caso del coaching el proceso no es lineal, sino bidireccional. Se basa en un diálogo entre coach y coachee (cliente) a un mismo nivel, a pesar de que sea el coach el que conoce las herramientas de mejora. Es el cliente el que termina realizando la tarea, tras la utilización del entrenamiento o las pautas consesuadas con su coach. Como ejemplo, es lo mismo que preparar una maratón, puedes contratar a un entrenador para que te prepare pero la persona que realizará la carrera y llegará a la meta serás tú, de hecho el entrenador es probable que ni siquiera corra el maratón, porque quizás ni él mismo esté capacitado para hacerlo. Quien dice una meta deportiva, dice una meta personal, empresarial o educativa.
Diferencias entre coaching y mentoring
En el mentoring, para poder ayudar al alumno, el mentor ha de ser un experto en la materia en la que se está trabajando y ejercer desde ahí de guía y tutor hacia el objetivo marcado, que tanto puede ser formativo como tener una meta más definida en el tiempo (elaborar un trabajo de fin de carrera, iniciar una empresa, aprender un oficio, etc.). El mentor por tanto lo que hace es transmitir su experiencia, a parte de su conocimiento, en el campo tratado. El cliente en este caso es un aprendiz (mentoree).
Por otro lado, el coach no necesita conocer nada acerca del trabajo del cliente. El coaching ayuda a descubrir el propio potencial de su cliente actuando como facilitador. Además, el coach ha de evitar transferir experiencias propias.
En ambos casos hablamos de dar consejos e intentar que el cliente los interiorice.
Diferencias entre coaching y counseling
En este caso el counseling comparte ciertas características con el asesoramiento psicológico, el coaching y resto de disciplinas. El counselor es aquella persona a la que se acude para realizar una consulta determinada, en la que el cliente (counselee) espera recibir un asesoramiento, indicación, orientación o información que le sea útil para mejorar una situación personal de cualquier tipo (profesional, educativa, personal, etc.) que le facilite la toma de decisión de forma autónoma. El counseling es una herramienta más global de la cual se nutren el resto. De hecho, este vocablo está muy extendido en américa para definir al orientador, asesor o consejero en general.
Por counseling quizás no sea conocido, pero realmente es gran parte del trabajo realizado en las consultorías psicológicas ya que su carácter más general engloba mucho más la mejora del desarrollo personal que el coaching o el mentoring, más focalizados en la consecución de una meta concreta. El counseling propicia más el desarrollo integral de la persona tanto a nivel psicológico, social, profesional y vital en general.
Diferencias entre coaching y orientación
En psicopico.com se encuentra un artículo relacionado directamente con este aspecto el cual sugieron su lectura: Diferencias entre orientación profesional, laboral y vocacional.
La orientación, tal y como se conoce hace referencia a ámbitos como el orientador educativo, laboral, profesional o incluso el orientador familiar. Un buen orientador ha de conocer buena parte de las características del resto de herramientas.
Un ejemplo práctico de lo que es un psicoterapeuta, un coach, un asesor, un mentor, un counselor o un orientador
Por si todavía no ha quedado del todo claro, pongamos un ejemplo sencillo. Imagina que quieres montar una empresa por primera vez y no sabes como hacerlo, podrás solicitar ayuda a uno u otros en función de tus necesidades es decir:
- Si no sabes que tipo de empresa montar, necesitas un orientador.
- Si sabes que tipo de empresa montar y tienes conocimientos sobre la materia, pero no sabes como conseguir el objetivo, necesitas un coach.
- Si sabes que tipo de empresa montar pero te gustaría adquirir experiencia y te tutoricen, necesitas un mentor.
- Si quieres montar una empresa pero no sabes por donde empezar, necesitas un asesor.
- Si quieres montar una empresa pero no tienes tiempo, no te organizas y te supera la situación, necesitas un counselor.
- Si quieres montar una empresa, pero quieres tener de socio a un amigo imaginario, necesitas un psicólogo clínico y su posterior psicoterapia.
Puedes cambiar el término “empresa”, por cualquier otro tipo de aspecto (una carrera universitaria, un objetivo deportivo, una relación personal, etc.).
Una vez que ya has aprendido las diferencias solo te queda contactar con el profesional que más se ajuste a tus necesidades. Si piensas que necesitas un coach infórmate y acude siempre a profesionales de coaching de garantías para evitar posibles malas prácticas.
La psicología como herramienta de mejora, en multitud de ámbitos
Recuerda además, que la psicología y por tanto el psicólogo es el especialista en comportamiento humano, que podrá estar especializado y elegir cada una de estas herramientas en función de las necesidades para contribuir a la mejora personal. Los psicólogos pueden ayudarte en diversas facetas, existen psicólogos del deporte, educativos, clínicos, industriales, de las organizaciones y de trabajo, psicólogos orientadores (educativos, profesionales, vocacionales, laborales, familiares), psicólogos especialistas en marketing y publicidad, psicólogos sanitarios, psicólogos clínicos, psicólogos especialistas en coaching, asesores psicológicos, psicólogos sociales y de intervención social, especialistas en habilidades sociales, especialistas en inteligencia emocional, psicólogos forenses, penitenciarios, mediadores, peritos y un largo etcétera más.
Todo esto lo digo por seguir luchando contra el encasillamiento de la figura del psicólogo. Ir al psicólogo no tiene porqué implicar un problema mental. No le tengas miedo, ni sientas vergüenza por asistir a un psicólogo y empieza a entrenar tu mente.
¿Te ha quedado algo más claro? En caso de duda deja tu comentario y entre todos podremos solucionarla y seguir ampliando la información del artículo. Este es mi punto de vista, ahora me gustaría saber el tuyo.
MUY ACLARATORIO , ENRIQUECEDOR , PRACTICO Y EJEMPLIFICATIVO. MUCHAS GRACIAS
¡Gracias por tus palabras Blanca! Se trata de dar valor a las profesiones y hacer entender que no es lo mismo una cosa que otra. Nuestras necesidades son las que nos derivan a uno u otro profesional, que debe reunir ciertas competencias. Un saludo.
Los primeros que lo tendríamos que tener muy claro somos los psicólogos, sobre todo desde la ética debemos enfocarnos y derivar a las personas según sus necesidades.
Muy claro el articulo, de fácil comprensión, entre tanta terminología es fácil perderse.
Comparto las ideas que expresas y también me ha gustado la clave de humor con el video de Broncano.
¡Hola Jimena!
Gracias por tu comentario y palabras. Sí, el principal objetivo del artículo es explicarlo de manera clara y sin rodeos lo que es cada cosa. El profesional de cada rama debe asumir su propia ética profesional y derivar al especialista que más se adapte a las necesidades de cada caso. La psicología no solo es sanitaria, pero deben estar claros los límites. Creo que es una buena forma de valorar las funciones globales de la psicología para que los clientes sepan a donde acudir sin miedo a ir a un psicólogo sin prejuicios ni etiquetas mal construidas.
Un saludo,
Iván Pico
Me pareció muy clarificador y respetuoso con todos los diversos saberes y profesiones que abarcan la conducta humana.Me alegra ver la madurez y sencillez para dar lugar , con sus especificidades y limitaciones , a todos estos saberes que crean relaciones de ayuda diversas.
Un cordial saludo
Florencia
Gracias por tus palabras Florencia.
Eso es, se trata de saber las competencias y áreas de actuación de cada profesional e intervención a realizar.
Un saludo,
Iván Pico
Psicólogo en Internet
Muy buen articulo! Clarificador y sobre todo muy respetuoso de cada profesión. Te felicito!
¡Gracias Ariela! De eso se trata, de saber las competencias de cada uno y elegir la apropiada para cada intervención 🙂
Hola! gracias por el artículo, pero me quedé un poco confundida, por que me aparece en inglés, pero con algunas palabras en español y luego acá todos los comentarios están en español, entonces, no se si mi browser lo tradujo automatico, o estaba escrito en Spanglish? gracias
Hola.
El artículo tiene una versión en inglés que quizás tu navegador detectó. Para poder ver la versión en español tienes que cambiar el idioma de la web. Arriba a la derecha (versión PC) o abajo de todo (versión PC y móvil).
Un saludo,
Iván
Hola Iván,
felicidades por tu artículo, aclara muchos conceptos y amplía las funciones a las que nos podemos dedicar los psicólogos, pero aún me queda alguna duda 🙂
Acabo de terminar mi grado en Psicología, y mi duda es: ahora mismo, sin ningún estudio más ¿puedo realizar legal y éticamente funciones de psicoterapeuta, coach, asesor, counselor u orientador? Tengo claro que voy a seguir formándome (en la medida en que mi trabajo y familia me lo permita, tal y como he realizado el grado), pero me gustaría empezar a ejercer de psicóloga y me cuesta ver la luz. Inicié los estudios de grado con una cierta edad, con vocación de ayudar a las personas, y ahora una vez finalizados veo más impedimentos que salidas.
Espero puedas darme un poco más de luz, y te felicito por tu artículo.
Saludos cordiales,
¡Hola!
Muchas gracias por tu comentario. Pues para resumirlo bien, básicamente una vez terminada la carrera lo único que te impide legalmente realizar esos trabajos que dices son aquellas actividades que esté restringidas a tener en posesión un título habilitante. Es decir, no podrías ejercer en el ámbito de la salud sin tener el título de Máster en Psicología General Sanitaria o el PIR realizado y ser psicóloga clínica. O el otro caso actual es ejercer de orientadora educativa en un centro educativo, que exigen tener el Máster de Profesorado con la especialidad en Orientación Educativa pertinente. Todo lo demás ya dependerá de tu formación de posgrado que realices pero con el interés de formarte tú misma como psicóloga no porque te lo vayan a exigir.
Por ejemplo, en mi caso no ejerzo como psicólogo sanitario. Si bien, no te voy a engañar, tener ese título sí que abre muchas puertas. Sin embargo, yo he decidido ejercer en otras áreas de la psicología (deportiva, social, orientación educativa y profesional, familiar, rendimiento personal, etc…) y cuando tengo un caso vinculado más a temas sanitarios lo derivo a un especialista en ese ámbito para evitar problemas.
¡Espero haberte ayudado!
Un saludo,
Iván Pico