La cirugía estética y la autoestima

Parte de nuestro bienestar personal se basa en como nos percibimos a nosotros mismos, como vemos nuestro propio reflejo sobre la superficie de un espejo y el impacto que eso supone en nuestro equilibrio emocional. En ocasiones una autoestima baja se debe a creencias irracionales sobre nuestro aspecto físico en comparación con el resto de personas que en cierto modo nos bloquea y limita el crecimiento personal.

Otras veces, la causa es la modificación por causas externas de nuestro aspecto, ya sean derivadas de una enfermedad, como puede ser un cáncer de mama que obliga a la extirpación de un seno o por algún tipo de accidente que deja nuestro cuerpo dañado por cicatrices o incluso posibles mutilaciones.

Cuando nuestra imagen corporal se ve afectada ya sea por factores externos o internos derivados de la propia personalidad y complejos del individuo, cobra especial interés la cirugía estética como solución viable para reducir estos problemas de autoestima personal, ya sea mediante intervenciones como la mamoplastia en las mujeres o la rinoplastia.

Es fundamental cuando decidimos someternos a una operación de cirugía estética contar con los mejores profesionales para garantizar una intervención seguro y acorde con nuestros deseos. En este aspecto, destaca la labor de cirujanos estéticos como el Dr. Mario Secorun, director de la Unidad de Cirugía Plástica de la Clínica Montpellier de Zaragoza. El Doctor Secorun es un profesional que respeta tres elementos fundamentales en el tratamiento: la seguridad, la garantía  y la experiencia. Además, de poseer los mejores medios técnicos para que los resultados sean eficientes, por ejemplo, minimizando las posibles cicatrices.

La cirugía estética puede ser una buena herramienta en muchos casos para mejorar la autoestima siempre y cuando se esté en buenas manos y se haga de manera razonable y sin caer en falsas creencias. Los problemas de autoestima pueden tener una raíz mucho más profunda que necesitará también mejorar otros aspectos de nuestras vidas o solicitar ayuda profesional en el área de la psicología para mejorar nuestro autoconcepto personal y nuestra propia autoeficacia personal y emocional.

El proceso de mejora de la autoestima.

Por tanto, la cirugía estética en algunos casos debe ser acompañada también de otro tipo de tratamiento psicológico  que acompañe al paciente en la recuperación de su bienestar personal, tanto mental como físico. En el plano mental, al proceso de acompañamiento de la cirugía estética, se deberían incluir ciertas pautas de mejora de la autoestima personal a nivel más cognitivo resumidas en 5 fases fundamentales:

1. Detección de pensamientos automáticos. Ser honestos con nosotros mismos sobre porqué pensamos y tomar autoconsciencia sobre ellos.
2. Identificación de las distorsiones cognitivas o creencias irracionales. Aprender a ponerle nombre a aquello que nos hace dudar sin miedo.
3. Búsqueda de evidencias, o validación de nuestras creencias personales. Es decir, ¿en qué se fundamenta nuestro pensamiento?
4. Modificación del pensamiento irracional. Reconstruir nuestro pensamiento para afianzar las nuevas ideas sobre nosotros mismos.
5. Realizar prácticas de identificación de las emociones y nuestros pensamientos. Es un proceso que necesita de refuerzos positivos para evitar volver a recaer en pensamientos distorsionados.

Todo esto fortalecerá nuestra percepción de nosotros mismos cuando nos miremos al espejo y mejorará nuestra confianza. Nosotros somos dueños de nuestro propio cuerpo.