Poco a poco nuestras vidas parecen retomar la normalidad que teníamos antes de la pandemia del COVID-19. La vacunación general y todas las medidas realizadas de prevención, test, mascarillas y distancia social, a lo largo de estos más de dos años de pandemia han servido para que la convivencia con el virus esté más controlada. No obstante, hablamos de convivencia, porque el virus y la pandemia sigue presente. Sino que le pregunten a las personas que han sufrido COVID-19 y mantienen afecciones persistentes del mismo o secuelas importantes tras superar el virus.
Existen personas infectadas por el virus SARS-CoV-2, culpable de la enfermedad COVID-19, presentan efectos a largo plazo en lo que se denomina COVID-19 persistente, de larga duración o incluso en algunos casos COVID-19 crónico. Los últimos estudios determinan que entre un 10 y un 20% de los pacientes presentaron síntomas persistentes a lo largo de las siguientes semanas de su presumible recuperación. Esta problemática persistente puede durar semanas, meses o incluso años y suelen ser más frecuentes en las personas que han sufrido la enfermedad de forma más grave, a pesar de que sí se relatan casos de personas con síntomas leves que continúan con ellos posteriormente. El tratamiento correcto de este tipo de síntomas es fundamental para paliar sus efectos a lo que no ayuda la saturación médica pública actual por lo que no debemos descartar la utilización de los servicios médicos privados para una rápida intervención sin esperas en cualquiera de las patologías relacionadas que te pueden ayuda si tienes COVID persistente de manera especializada, rápida y eficiente.
Entre los síntomas de las personas que sufren COVID prolongado se encuentran afecciones de tipo físico y mental, algunas de ellas son las que siguen:
Además, el COVID prolongado es una condición fisiológica que pueda provocar sintomatologías mayores, llegando incluso a provocar la incapacidad de la persona derivados de daños pulmonares severos, daños cardíacos y en el sistema circulatorio, daños, en el riñón, daños neurológicos o incluso daños a nivel emocional persistentes que puedan condicionar la salud mental del paciente.
Debemos pensar que se trata de una enfermedad relativamente reciente por lo que día tras día se van incorporando mejoras en los tratamientos a medida que se avanza en la investigación del virus. La clínica MipSalud es una de las más especializadas en el tratamiento de la COVID-19 en Madrid, donde te atenderán de manera prácticamente inmediata los mejores profesionales del sector, actualizados con las últimas investigaciones.
Los tratamientos más comunes de estas dolencias son una buena prescripción farmacológica (broncodilatadores, complejos vitamínicos, analgésicos y antinflamatorios, etc. Todo ello bajo una correcta supervisión médica. En otros casos se realizan tratamientos rehabilitadores y fisioterapéuticos para aliviar síntomas de fatiga o cansancio articular así como fisioterapia respiratoria. Como avanzamos, otro de los problemas crónicos más derivados de la enfermedad son los estados mentales, por lo que el tratamiento psicológico suele ser muy recomendable para superar o aprender a convivir de la mejor forma posible con estos síntomas persistentes.
Cuanto antes se tratan los problemas, antes tendremos las soluciones. Cuidémonos.
U.S. Department of Heath & Human Services. HHS.gov