
El término ansiedad podría ganar el premio a palabra del año. El ritmo de vida actual, lleno de estímulos infinitos incontrolables que nos saturan dan lugar a que nuestros niveles de estrés y ansiedad se disparen como nunca antes una sociedad ha experimentado. Debemos entender la ansiedad como algo necesario para nuestra supervivencia, como ese activador que nos prepara para enfrentarnos a los problemas, pero que por desgracia nos invade ante tantos pequeños “problemas” que tenemos hoy en día, de los cuales no sabemos muchas veces discernir cuáles son reales o prioritarios y cuales no. Esto nos lleva al caos y desregulación interna.
Por ese motivo, se vuelve necesario implementar hábitos saludables para prevenir esta sobreexcitación, sin descartar el uso de ciertos productos disponibles en parafarmacias que pueden ser un buen complemento a estos buenos hábitos, como los que puedes encontrar aquí. Ciertos suplementos naturales, infusiones, aceites o pastillas naturales podrían integrarse en esos buenos hábitos de cara a mejorar el bienestar personal. Evidentemente, todo debe ser previamente consultado con un profesional para valorar la medida, necesidad y producto que se adapte más a ti para evitar descompensaciones para evitar que el remedio sea peor que el problema.
Como decíamos, una vez que tengas implantada un rutina o un cambio de hábitos comportamentales con tu profesional del comportamiento humano, el psicólogo a poder ser, es hora de hacer la consulta con el profesional de estos productos complementarios. Existen múltiples opciones naturales, que se pueden tomar en forma de pastillas, suplementos vitamínicos, infusiones o incluso en formato de aceites.
Suelen ser extractos de plantas o sustancias que se asocian a reducción de ciertas tensiones nerviosas para promover la relajación, siempre respetando las dosis, tiempos, indicaciones y contraindicaciones. Como ejemplos de estos tenemos:
En este aspecto, entender que más que efecto medicinal es un efecto más enfocado a suplementar nutritivamente para mejorar el funcionamiento normal del sistema nervioso, que al igual que las pastillas deben tomarse de manera responsable, ya que lo ideal sería no tener la necesidad de tener que suplementarlos y adquirir sus propiedades de manera natural a través de nuestros propios hábitos y nutrición. Entre estas vitaminas se encuentran:
Esta solución está mucho más extendida culturalmente y forma parte de nuestros hábitos, siendo en la mayoría de los casos opciones suaves y agradables que incluso despiertan un interés también por el propio placer del sabor que despiertan. Algunos ejemplos clásicos son:
Como avanzamos, estos productos deben ser complementos a nuestros buenos hábitos de vida, sino de poco servirán. La manera más práctica de hacerlo, y siempre bajo superficial de profesionales, es utilizando por ejemplo las infusiones relajantes por la noche o los suplementos con pautas responsables de uso, pero deben ir acompañados de varios aspectos claves:
Por todo esto, los suplementos de parafarmacia pueden ser un buen aliado en mantener tu ritmo de vida en un equilibrio sano y estable.