Que un juanete no te impida disfrutar del camino de la vida, en todos los sentidos
Desde que nuestros antecesores lograron evolucionar para caminar de forma bípeda se ha ido perfeccionando esa destreza motriz para mejorar nuestros días. Tanto es así que incluso caminar se ha convertido en uno de los ejercicios más saludables que existen y ayuda a las personas a mantener una buena tonificación de sus músculos, prevenir enfermedades y mejorar nuestro propio bienestar personal. Caminar es una actividad que realizamos para nuestras tareas cotidianas las personas de todas las edades, pero que también es usado como forma de ejercicios físico y liberar tensiones mentales acumuladas a lo largo del día, sobre todo cuando salimos a pasear al aire libre. La pandemia ha acentuado el número de personas que salen a caminar día a día como ocio y aventura, creciendo mucho las actividades de tipo senderismo y paseos en lugares donde poder compartir momentos con los nuestros. Es por eso que cumple una función doble en nuestro bienestar mental, a parte de liberar los neurotransmisores típicos de la propia actividad física funciona como actividad social e incluso meditación personal para cuadrar y equilibrar nuestra mente.
Gracias a nuestros pies somos capaces de construir un camino, a pensar sobre nuestro pasado, presente y futuro y crear objetivos vitales nuevos. Tener cuidados nuestros pies es fundamental para poder movilizarnos. Movernos nos da libertad, por eso opta siempre por mantener tus pies listo para caminata de la mano de profesionales podólogos como los de Clínica San Román, con más de 40 años de experiencia en el cuidado de los pies.
¿Qué son los juanetes?
Uno de los mayores problemas de pies que existen es el relacionado con los juanetes. El hallux valguso juanete es una deformidad progresiva que afecta a la parte delantera interna de los pies. Produce una desviación del dedo gordo y una protuberancia ósea a la altura de la articulación del primer dedo del pie hacia el segundo. Esto produce gran dolor y malestar debido a la presión que ejercen sobre el propio zapato, sobre todo si no los atajamos a tiempo. Esta protuberancia incomoda nuestro andar y puede ser causa de evitar esos paseos que tan bien nos sientan. Existen diferentes fórmulas para aliviar sus efectos, sobre todo en las primeras etapas de formación, pero puede ser requerida una cirugía de juanetes para conseguir retomar de manera saludable nuestras caminatas y andar cotidiano.
En este otro artículo hablábamos sobre la relación entre la motivación en el juego y…
Beneficios psicológicos de andar y disfrutar del camino
Caminar es algo tan natural que perder la movilidad nos limita o nos hace sentirnos en una prisión interna, nos falta libertad si no podemos movernos. Son muchos los beneficios que apoyados en la psicología nos proporciona el buen hábito de caminar, pero destacaría los siguientes.
Fomenta la concentración. Cuando necesitamos concentrarnos en algo, a veces recurrimos a andar o pasear. Es muy habitual ver a personas hablar por teléfono mientras están dando vueltas. Es una forma de liberar la mente y pensar con mayor claridad. Esto puede ser debido a que un ejercicio moderado motiva las funciones ejecutivas de nuestro cerebro sin gastar excesiva energía que impida focalizar la atención en otras tareas.
Evade pensamientos intrusivos. Cuando estamos agobiados por algún pensamiento, ansiosos o con estrés acumulado echarnos a andar va a reducir en parte esa sensación de pensamiento en bucle. Por un lado, si lo hacemos solo por el mero hecho de hacer ejercicio y aliviar tensión, y por otro si lo hacemos acompañados como medida para poder compartir con otras personas esos pensamientos que nos tienen bloqueados.
Regula la actividad del cerebro. El ejercicio moderado comienza a liberar cuatro de los neurotransmisores cerebrales más importantes para conseguir un equilibrio hacia el bienestar, principalmente endorfina, que actúa además como un relajante natural, por lo que estaremos más tranquilos.
Nos mantiene motivados. Esa sensación de mejora personal gracias al ejercicio libera dopamina en el cerebro que nos invita a repetir el proceso del ejercicio, por que nos mantiene motivados tanto para hacer el ejercicio como para seguir liberando tensiones. Es una rutina beneficiosa y sencilla de establecer, ya que no requiere de una gran capacidad física.
Mejora la creatividad y toma de decisiones. Salir de nuestra estancia habitual y ver nuevos parajes nos hará observar nuevos estímulos. Se aprenden nuevas experiencias que se transferirán a la hora de tomar decisiones en otros momentos de nuestras vidas.
Previene enfermedades. Estar enfermo es evidente que repercute sobre nuestro bienestar mental. Andar previene de enfermedades relacionadas con la hipertensión, colesterol, diabetes, obesidad, problemas sexuales, previene el cáncer, etc. Además, de mejorar la adquisición de vitamina D cuando paseamos bajo la luz del sol; mejorar la circulación; evitar la ingesta de medicamentos como ansiolíticos o antidepresivos; tonifica los huesos y aumenta la densidad ósea por lo que los previene de lesiones; y un largo etcétera.
El primer paso es el más importante, que nada te detenga a seguir dando pasos firmes en la carrera de la vida.
Director y creador de Psicopico.com. Psicólogo Colegiado G-5480 entre otras cosas. Diplomado en Ciencias Empresariales y Máster en Orientación Profesional. Máster en Psicología del Trabajo y Organizaciones. Posgrado en Psicología del Deporte entre otras cosas. Visita la sección "Sobre mí" para saber más. ¿Quieres una consulta personalizada? ¡Escríbeme!