Encontrar el equilibrio en tu relación es difícil. Si fuera fácil, todo el mundo lo tendría. Pero con un poco de trabajo y paciencia, puedes asegurarte de que tú y tu pareja sacáis el máximo partido el uno del otro. He aquí cómo hacerlo:
Sé consciente de cómo gastas tu tiempo
Todos necesitamos que nos recuerden que está bien decir que no. Y a menudo lo hacemos porque no queremos decepcionar a la otra persona. Pero si no te cuidas a ti mismo y a tus relaciones, ¿de qué sirven?
¿Cómo priorizas tu tiempo? Tienes un número limitado de horas al día, así que es importante dedicarlas a las personas que más te importan. El reto es saber quiénes son esas personas. No es una cuestión fácil, pero una forma de empezar es preguntarse qué es lo que más importa en la vida, trabajo , familia, amigos o salidas para tener sexo con escorts en Lima. Una vez que lo hayas averiguado, intenta hacer una lista de todas las cosas de cada lado: ¿Cuáles son más importantes que otras? ¿Qué se puede eliminar de ambos lados (o sólo de uno)?
Aprende a poner límites
Hay que saber decir que no. Hay que saber poner límites a lo que se puede y no se puede hacer. Tienes que ser capaz de poner límites a tu tiempo, y también a tus reservas de energía.
Puede que no puedas irte de vacaciones con tus amigos porque estás demasiado ocupado cuidando a un familiar enfermo o limpiando después de una de las fiestas de tus hijos, pero eso no significa que debas sentirte culpable por ello. No pasa nada si las cosas no siempre funcionan a la perfección en nuestras relaciones; siempre que nos aseguremos de que hay un espacio para nosotros mismos en nuestras vidas, entonces todo funcionará bien.
Practica la honestidad
La honestidad es la mejor política. Debemos ser honestos con nosotros mismos para poder serlo con nuestra pareja. Si eres honesto con tu pareja, podréis tomar buenas decisiones juntos.
- Si no eres honesto con tu pareja, esto puede llevar al resentimiento y la frustración.* La clave es tener una conversación real sobre lo que está pasando para ambos. La clave es tener una conversación real sobre lo que os pasa a los dos. Tenéis que hablar de vuestras expectativas mutuas y de lo que hay que cambiar en la relación antes de que las cosas se os vayan de las manos: No existe lo “perfecto”, así que no esperes la perfección de nadie.
Hablen de sus necesidades como pareja
Tengan una conversación sobre lo que necesitan como pareja. Hablen de lo que quieren hacer juntos y también de lo que quieren hacer por separado. Sed sinceros el uno con el otro y hacedles saber cuánto tiempo pueden pasar solos o con sus amigos. Si necesitan un tiempo lejos del otro, no les presiones para que se queden en casa: ¡deja que vayan y vengan a su antojo!
Celebren sus diferencias
Sois una pareja y tenéis dos personalidades y formas diferentes de ver el mundo: eso es lo que hace que vuestra relación sea tan especial. Pero cuando se trata de vuestras diferencias de personalidad o estilo, puede ser fácil frustrarse e incluso enfadarse el uno con el otro.
Pero si quieres mantener tu relación sana y feliz a largo plazo, es importante que celebres esas diferencias en lugar de pelear por ellas. Recuerda: por mucho que te guste más el enfoque de la vida de otra persona que el tuyo, eso no cambiará lo que tú eres como individuo. En lugar de pelearse por las diferencias en la forma de ver o hacer las cosas, intenta encontrar formas de divertirse juntos a pesar de tener enfoques diferentes.
Por ejemplo: puede que una persona sea madrugadora mientras que su pareja es más bien un búho nocturno; puede que una persona prefiera el sexo matutino sin prisas antes del trabajo mientras que otra quiera un rapidito en la ducha antes de salir a trabajar; puede que una persona odie los viajes por carretera mientras que a su pareja le encanta hacer largos recorridos por nuevos paisajes (o viceversa). Cada pareja tendrá necesidades diferentes en torno a su vida fuera de ella, ¡y eso está bien! No significa que haya problemas en la relación si ambos miembros no disfrutan haciendo exactamente las mismas cosas a todas horas y todos los días; sólo hay que encontrar algo que funcione para ambas personas dentro de esas diferencias.
No te olvides de ti mismo
Al estar en una relación, es fácil anteponer las necesidades y deseos de tu pareja. Aunque esto es importante, tienes que asegurarte de no descuidar tu propia felicidad en el proceso de darle lo que quiere. Puede ser doloroso cuando tu pareja no se presenta para algo que te importa, pero si esto sucede más de una o dos veces, entonces podría ser el momento de algunas conversaciones honestas sobre cómo cada uno de ustedes quiere manejar las prioridades en el futuro.
Cuando nos enamoramos, solemos hacerlo porque alguien nos hace sentir especiales y cuidados, y porque nos gusta pasar tiempo con él. Pero a medida que las parejas crecen juntas con el tiempo, habrá momentos en los que no sean tan buenos para darse apoyo mutuo o para hacer que el otro se sienta amado y apreciado.
Conclusión
Encontrar el equilibrio en una relación no siempre es fácil, pero puede hacerse. La confianza, la honestidad, el establecimiento de límites y la celebración de las diferencias son elementos importantes para mantener el equilibrio en cualquier relación. Recuerda que nunca debes sentirte presionado u obligado a hacer algo que no quieres. Está bien que tu pareja no entienda por qué quieres o necesitas algo diferente de ella.
Al fin y al cabo, tus necesidades son tan importantes como las suyas; si te aseguras de cuidarte a ti mismo en primer lugar, podrás apoyar mejor a tu pareja con el paso del tiempo y encontrar la paz al saber que ambas personas implicadas han sido atendidas por igual. Si no lográis llegar a un acuerdo tal vez visitar https://cl.simpleescorts.com/ para encontrar chicas bellas dispuestas a ofrecerte sus servicios sexuales sea la mejor opción para los que quieren permanecer solteros fuera de una relación estable.
Añadir Comentario