Por qué acudir a un centro auditivo no es una mala señal

Solemos asociar las visitas a especialistas médicos de cualquier índole como una mala señal en lo concerniente a nuestra salud. Por supuesto que lo hacemos cuando tenemos una o varias patologías que tratar y curar, pero la acción de visitar un centro médico no siempre responde a un aspecto negativo.

Cada vez más veces los usuarios nos acercamos a los especialistas de la salud con el objetivo de prevenir enfermedades o patologías que, por edad o por otras circunstancias, vemos que podemos padecer. La prevención, por tanto, se erige como un mecanismo recomendable y efectivo para velar por nuestra salud a determinadas edades.

Centros auditivos

Los centros auditivos son el primer lugar al que debemos acudir cuando nos concierne nuestra salud auditiva, ya sea porque estamos notando anomalias en nuetros oídos o porque, como comentamos, deseamos someternos a un control preciso por parte de especialistas de la audición.

Con casi toda seguridad nos someterán a una audiometría por parte de los profesionales del centro (audioprotesistas), que son los encargados de evaluar la audición de cada uno de los pacientes. A grandes rasgos consiste en utilizar instrumentos específicos que emiten sonidos y palabras y que el paciente ha de escuchar y repetir siempre que el especialista se lo indique.

Esta prueba se compone de dos áreas principales, tonal y del habla, que examina diferentes aspectos de la salud auditiva del paciente. La audiometría tonal evalúa el umbral de percepción del sonido que alcanza a escuchar la persona. En cambio, la audiometría del habla. se centra en medir la comprensión del lenguaje y la capacidad de distinción entre fonemas.

La acción de acudir a un centro auditivo nos garantiza la atención por parte de un equipo especializado que conlleva una garantía en los resultados de las pruebas que nos vayamos a someter. Y es que el desconocimiento general que como sociedad tenemos de la salud auditiva, nos lleva, en muchas ocasiones, a ignorar o a prestarle poca atención al cuidado diario de los oídos, a pesar de ser uno de los órgamos más delicados de la anatomía humana.

Términos que cada vez suenan más

El hecho de aprender “a la fuerza” que la salud auditiva existe, patologías desconocidas para la gran mayoría están siendo más y más divulgadas precisamente por la proliferación de casos relacionados con la salud de los oídos. Hablamos, por ejemplo, de enfermedades como los acúfenos, la hiperacusia o la misofonía. Dolencias que son más comunes de lo que pensamos, pero que apenas tienen incidencia ni exposición mediática y, por tanto, no se conocen apenas. Todas ellas requieren de tratamiento especializado para poder volver a hacer vida normal.

En un centro auditivo nos ayudarán a tratar estas patologías, pero también, y casi más importante, a prevenir su aparición a través de un seguimiento personalizado de nuestra salud auditiva.