Saúde

(Español) ¿Puede el estrés provocar hemorroides?

Esta noticia non está dispoñible en galego…sentímolo. Proba en castelán. Apertas! For the sake of viewer convenience, the content is shown below in the alternative language. You may click the link to switch the active language.

Las hemorroides por estrés no son una rareza. El cuerpo humano responde de forma natural ante lo que considera un desafío o una amenaza y así aparece el estrés que, si se prolonga en el tiempo, puede tener efectos negativos tanto físicos como mentales.

La cantidad de cortisona y adrenalina que libera el cuerpo aumenta cuando una persona lo sufre y estas hormonas hacen que las venas se contraigan. La cortisona, además, ralentiza la velocidad a la que la comida viaja por el intestino, fomentando el estreñimiento. Ambas condiciones implican una mayor presión en la zona del recto y esto favorece la aparición de hemorroides.

¿Qué son las hemorroides?

Las hemorroides son inflamaciones de las venas en el recto y el ano que se asemejan a varices. Son el resultado de la presión constante y el esfuerzo en esta área, causada por el estreñimiento crónico o la diarrea, el envejecimiento, el embarazo y el esfuerzo físico pesado, entre otras causas.

Existen dos tipos principales de hemorroides: internas y externas. Las hemorroides internas se desarrollan dentro del recto y son generalmente indoloras, aunque pueden sangrar durante las evacuaciones intestinales. Por otro lado, las hemorroides externas se forman debajo de la piel alrededor del ano y pueden causar molestias, picazón o dolor, especialmente al sentarse o durante el movimiento intestinal.

Las hemorroides leves se suelen tratar con cambios en la dieta y el estilo de vida, como incrementar la ingesta de fibra y líquidos y hacer ejercicio regularmente. También puede aplicarse una crema para las hemorroides con los principios activos como la ruscogenina de acción antiinflamatoria, y la trimebutina, de acción anestésica. En casos graves o persistentes, pueden requerirse procedimientos médicos o quirúrgicos.

El impacto del estrés en el cuerpo

El estrés es una respuesta natural del cuerpo humano a situaciones que percibe como amenazantes. Provoca una serie de reacciones físicas y emocionales que incluyen el aumento de la frecuencia cardíaca, la sudoración, la tensión muscular y los cambios en el apetito y el sueño. Aunque el estrés puede ser útil al preparar al cuerpo para enfrentar desafíos, si se cronifica, puede tener efectos perjudiciales en la salud.

Diferentes investigaciones han demostrado que el estrés crónico tiene un impacto significativo en varios sistemas del cuerpo. En el sistema digestivo, aumenta el riesgo de problemas como úlceras gástricas, enfermedad del reflujo gastroesofágico y síndrome del intestino irritable.

En el sistema cardiovascular, el estrés crónico se ha vinculado a un mayor riesgo de hipertensión y enfermedad cardíaca. También puede debilitar el sistema inmunológico y aumentar así la susceptibilidad a infecciones y retrasar la cicatrización de heridas.

Además, un estrés cronificado puede afectar el sistema endocrino y desembocar en desequilibrios hormonales que contribuyan a una variedad de problemas, desde el aumento de peso hasta la disfunción sexual.

Entrada Relacionada

Estrés y sistema digestivo

El sistema digestivo es especialmente sensible a las emociones y al estrés. Cuando una persona experimenta estrés, su cuerpo responde liberando hormonas y neurotransmisores que afectan a la digestión. La respuesta de lucha o huida, una reacción común al estrés, provoca que el sistema digestivo se ralentice o se acelere, desembocando en problemas digestivos como diarrea o estreñimiento.

El estrés también altera la microbiota intestinal, un conjunto de bacterias beneficiosas que vive en los intestinos y que juega un papel clave en la salud digestiva. Este desequilibrio puede dar lugar a síntomas de Síndrome de Intestino Irritable (SII), una afección que se caracteriza por dolor abdominal, hinchazón, diarrea y/o estreñimiento.

Además, las investigaciones han sugerido una conexión entre el estrés y las úlceras pépticas. Aunque las úlceras pépticas suelen estar causadas por una bacteria llamada Helicobacter pylori, el estrés puede aumentar la producción de ácido en el estómago y esto contribuir al desarrollo de úlceras.

La Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII), que incluye la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, también se agrava por el estrés. Aunque éste no cause EII, puede desencadenar brotes y agravar los síntomas.

Estrés y hemorroides: una mala combinación

El estrés en sí mismo no provoca directamente hemorroides, pero desencadena comportamientos y respuestas físicas que contribuyen a su desarrollo. Uno de los principales factores es que el estrés puede llevar a problemas digestivos, como el estreñimiento, que es una causa común de las hemorroides. El esfuerzo para mover las heces duras aumenta la presión sobre las venas en el recto y el ano, lo que puede conducir a la formación de hemorroides.

Además, la respuesta al estrés del cuerpo conlleva un aumento de la presión arterial y puede hacer que las venas en el recto y el ano se inflamen y se conviertan en hemorroides.

Aunque las investigaciones en este ámbito son limitadas, algunos estudios han sugerido una posible relación entre el estrés y las hemorroides. Por ejemplo, el publicado en American Journal of Gastroenterology, que descubrió que los pacientes con hemorroides eran más propensos a informar de niveles más altos de estrés.

Sin embargo, el estrés es sólo uno de los muchos factores que pueden contribuir a padecer hemorroides. El envejecimiento, la obesidad, la dieta, el embarazo y la falta de ejercicio también juegan un papel fundamental.

Despídete del estrés y aleja las hemorroides

Para manejar el estrés y prevenir las hemorroides, es esencial incorporar prácticas diarias de bienestar. La meditación y el yoga pueden ayudar a reducir sus niveles, mientras que la actividad física regular puede liberar tensiones y estimular la digestión saludable. Una dieta balanceada, rica en fibra y agua, es crucial para prevenir el estreñimiento, una causa común de hemorroides. Técnicas de respiración profunda y mindfulness también pueden ser efectivas para manejar el estrés. Finalmente, asegurarse de tener suficiente descanso y sueño de calidad también contribuye a un manejo eficaz del estrés y a una salud general óptima.

Puedes acceder a información especializada siguiendo este enlace: https://proctolog.es/proctoblog/hemorroides-estres/

Redacción

Psicopico.com es un lugar donde aprender psicología de manera amena y sencilla. Intentamos acercar a todo el mundo cómo el mundo te entiende a ti y cómo entiendes tú al mundo apoyados en la ciencia del comportamiento humano: la psicología. Artículos sobre psicología social, psicología deportiva, salud, inteligencia emocional, orientación profesional y educativa y mucho más. Si quieres saber más sobre las últimas investigaciones sobre neurociencia y psicología también puedes visitar canalpsico.com