Todavía no se tiene consciencia de algunos problemas a los que se exponen estos encargados, como el síndrome del cuidador o el estrés provocado por el cuidado. Las personas que dedican a los cuidados en ocasiones sufren sobrecarga de responsabilidades que puede derivar en problemas más serios.
Para poder poner remedio este problema, es importante detectar a tiempo los signos de estrés en los cuidadores de personas mayores.
Uno de los problemas a los que se enfrentan más a menudo los profesionales de los cuidados es al síndrome del cuidador. Esta patología aparece cuando se dedica mucho tiempo a atender a una persona dependiente y se van descuidando otros aspectos de la vida personal que también son muy importantes para el bienestar.
En algunas ocasiones, los cuidadores pueden sentirse frustrados, con la sensación de no llegar a todo lo que tienen que hacer. La situación los absorbe de tal manera que muchas veces se ven obligados a dedicar menos tiempo a sus hijos, pareja o amigos, o a dejar de hacer aquellas cosas que les gustaban y les proporcionaban bienestar, acusando una gran sensación de falta de libertad.
Consecuentemente, uno de los principales riesgos para el bienestar del cuidador es caer en el aislamiento social, en depresión o ansiedad.
Si usted está al cuidador de alguna persona mayor de su entorno y se siente identificado con esta situación, plantéate la opción de contactar con un profesional de los cuidados, como los que encontrarás en Qida.es. Esta empresa de atención domiciliaria a mayores cuenta con profesionales como Laura Pujol Izquierdo y Oriol Fuertes Cabassa, para que el bienestar de los mayores sea inmejorable.
Existen una serie de señales que pueden alertarnos de que una persona de nuestro entorno o uno mismo está sufriendo el síndrome del cuidador o algún otro malestar derivado de la entrega a los cuidados.
En un inicio aparecen algunos síntomas como el cansancio persistente al mismo tiempo que problemas del sueño, y en consecuencia una elevada irritabilidad.
Si este síndrome está más desarrollado también se puede apreciar que la persona que lo sufre muestra desinterés por sus aficiones y nuevas experiencias, abandono de su vida personal, y en los casos más extremos aislamiento social.
Algunos de estos síntomas también aparecen con la depresión o la ansiedad, y es que el síndrome del cuidador puede aparecer junto a estas enfermedades.
No hay una receta exacta, para evitar los males nombrados, pero estos consejos le pueden ayudar: