La pérdida de audición es algo que nos empieza a preocupar cuando llegamos a cierta edad y comienzan las limitaciones. Por orden general, no es habitual que se padezca de una hipoacusia grave de la noche a la mañana y, salvo para personas con enfermedades congénitas, las dificultades son bastante paulatinas.
Los efectos, que simplemente los vamos ignorando, apenas los notamos y, de alguna manera, hasta nos acostumbramos a oír peor. Esto, que es algo que debemos evitar, se resuelve rápidamente acudiendo al médico para que nos diga qué es lo que ocurre y cuál es la solución que le podemos dar.
El oído no es un sentido -salvo por ciertas enfermedades o accidentes- que se vaya de repente y es por eso que debemos atender a cuál es la respuesta que nos da ante los sonidos, frases o palabras. Escuchar mal, en ocasiones, puede deberse a otras afecciones, infecciones e incluso suciedad y es por esto que deberíamos aprender a diferenciar.
En una pérdida moderada el uso de audífonos se vuelve algo de lo que no podemos prescindir pero siempre y cuando hayamos acudido a la consulta para que sea el otorrino quien nos dé el visto bueno. A continuación, en cualquier caso, os dejamos algunos de los síntomas de problemas de audición más habituales:
Puede parecer una tontería pero cuando estamos acostumbrados a un volumen medio para lo que escuchamos en la radio o el televisor y comenzamos a ponerlo más alto, puede que nos enfrentemos a una pérdida leve del oído pero todavía ni siquiera nos estamos dando cuenta de ello.
Aunque confundir palabras parecidas podría deberse a otros problemas o afecciones, es importante que atendamos a qué ocurre para descartar que se trata de un tema que tiene que ver con el oído. Acudiendo al otorrino y dejando que nos haga los exámenes necesarios, saldremos de dudas casi de inmediato.
Uno de los síntomas más claros de que podemos tener pérdidas auditivas considerables son los pitidos y zumbidos constantes en el oído. Bastante molestos e irritantes, debemos acudir cuanto antes al especialista para que nos diga qué es lo que puede ser y descartar así problemas mucho más graves.
¿Suele ser habitual que llamen al timbre o golpeen la puerta y no te enteres? Si la respuesta es sí, puede que igualmente estés ante un problema de audición que se está agravando y al que hay que poner solución. Si bien, una vez hecho el diagnóstico puede ser cualquier otra cosa, resulta fundamental que vayas cuanto antes a una revisión.
En el centro auditivo Sonoclinic en Madrid contamos con profesionales capaces de ofrecerte las mejores soluciones para tu pérdida de oído. Las revisiones, adaptadas a cada uno de los casos que nos pueden llegar, las realizan médicos cercanos y que siempre están dispuestos a escuchar todo aquello que les tengas que decir.